Link es tan mediocre como tú.

Porque usted es muchas otras personas y no solo usted.

Muchísimas de las cosas que le influencian en la vida escapan de su control, no se puede decir con total seguridad “yo soy yo mismo” o “yo soy quien quiero ser”. Ni el mas puro racionalista escapa de su naturaleza de imitación y percepción subconsciente. Incluso el mas libre ser de este planeta juega bajo unas reglas abstractas de alguna partida que no ha iniciado.


Hijo de puta.

Las mecánicas de los juegos de rol le convierten en un potencial mediocre en la vida.

No soy mucho de meterme con aquello que da alas a la vida de mucha gente, un pozo de imaginación inabarcable y de mundos de fantasía estimulantes; pero las mecánicas simples de un juego de rol cualquiera (ir subiendo de nivel, adversarios de dificultad perfectamente creciente, objetivos marcados, hilo conductor lineal) condicionan la historia en la que este se desarrolla.

Que bueno que esta Link.


Usted es una persona de entre 14 y 25 años que ha crecido un poco apartado de la gente jugando un montón de videojuegos en algún tranquilo pueblo. Probablemente un hombre y probablemente ligeramente mas inteligente que la media pero sin grandes logros en la vida. 

Usted era un pequeño niño influenciable, sumergido en mundos nuevos que escapan a la experiencia mundana, nutriendo su creatividad y creando lazos invisibles con los personajes ficticios de este mundo de aventuras. Es muy fácil sentirse identificado con el protagonista. Normalmente un chico común, adaptado a una vida sin muchos sobresaltos, con muchos sueños y el sentimiento de ser un poco diferente.

¿Que pasa en el juego? Un día de golpe, se presenta una causa pura y cristalina para que muestres todo tu valor, fuerza determinación; de golpe tienes que salvar a tu princesa, salvar el mundo, rescatar un rey, derrotar a Voldemort, construir un arca, eres un héroe de leyenda, descendiente de tal y cual, los has sido toda tu vida y tu momento ha llegado. ¡Fuego, proyectiles, magia, pirotecnia, ejércitos malignos, heroicidades, justicia! Sino, no habría juego, como a nosotros no nos pasa, tampoco hay juego. Imagina que en Pokemon, mágicamente no te diesen un pokemon. Probablemente, andarías en círculos, sin salir de tu aldea natal, hablando siempre con la misma gente y cagándote en el programador.


Hola, vengo a joderte la vida como última voluntad.



Nunca existe este momento. Nunca nadie te dice: ahora. No se distinguen villanos de amigos, princesas de brujas ni héroes de psicópatas. Quizás no exista la diferencia. Los héroes de las historias serian considerados parias y frikis en la vida real. O tendrían algún presunto desorden mental, como todos los personajes de Evangelion.


Los que sonríen en todas las fotos es porque están locos.


Tu ve esperando tu momento, criajo de mierda, que algún día va a aparecer Hagrid para decirte que eres un mago o un filisteo o gay o un descendiente espartano. 

Las ideas subyacentes de las historias que lees, y que por lo tanto emocionalmente también vives, se cuelan en tu mente mucho mas peligrosamente que una orden dictatorial. Es mas, como has disfrutado con el juego adoptas esas ideas con cariño en lo mas fondo de tu ser.

No estoy diciendo que sea malo jugar a Legend of Zelda, todo lo contrario, solo quiero advertir de como nos formamos inconscientemente, victimas o villanos de nuestra condición social. No estoy diciendo que no haya nada que hacer ni que no querremos influencias externas, pues eso es imposible.

Simplemente cuidado con tus influencias, eres lo que ves, eres lo que sientes eres tu voluntad y también tus pensamientos. Eres Sakuragui, eres Son Goku, eres Luffy, eres Inuyasha, eres hasta Sailor Moon, eres Link, eres Aragorn: eres tus dioses de infancia. Saca lo mejor de cada cosa, nútrete de tus influencias; serán el palo y la piedra.

Aunque mas difícil aún sea distinguirlos en la realidad.



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